Mauricio Macri afirmó este lunes que su decisión de volver a la política de Boca Juniors responde a la necesidad de “no abandonar al club a la arbitrariedad, el autoritarismo y la prepotencia”, como define a la actual gestión de Juan Román Riquelme, vicepresidente segundo, titular del Consejo de Fútbol y uno de los mayores ídolos de la historia “xeneize”.
En el lanzamiento de la fórmula que encabeza Andrés Ibarra, el expresidente de Boca se comprometió a repetir “el ciclo más exitoso de la historia” que lideró entre 1995-2007 y terminar con el “manejo discrecional” que reina actualmente en la institución.
“Riquelme suele decir que Boca es el patio de su casa y se maneja como si fuese así, pero Boca es una de las instituciones deportivas más grandes del mundo. Como está hoy no tiene futuro y duele, por eso, cuando Andrés me pidió si lo podía acompañar, acepté. No puedo abandonar a Boca a la arbitrariedad, el autoritarismo y la prepotencia”, argumentó durante una conferencia en Puerto Madero.